Iogrea

Aunque hace poco estuvimos por Abantos hacía mucho que no pasábamos al lado de los embalses así que como Tortu y compañía querían ir por la zona aprovechamos para hacer unos pequeños retoques y mejorar una ruta ya de por si bastante completa y chula.

Tras unas cuantas llamadas y mensajes de gente que no puede venir llegamos Juan y yo un poco tarde a la cita así que le digo a Julián que salga andando que ahora les pillamos y JC se queda esperándonos.
Entre que sacamos las bicis y nos cambiamos se nos van 25min, nos toca apretar el culo para pillar al grupo. Empezamos con frío pero como toda la primera parte es subida en los primeros rampones antes de llegar a las zetas ya nos hemos quitado la capa superior.
Al comenzar a subir las zetas ya divisamos la cola del pelotón y nos anima a esforzarnos un poco para pillarlos.
Hay gente nueva apuntada y se promete la ruta dura, al menos para Pedro, que en las primeras zetas ya va andando con un monólogo con las raices.

Calentitos por el esfuerzo acabamos las zetas en el medio del pelotón y tras reagrupar proseguimos todos hacia Abantos. El aire hace acto de presencia.... y de qué manera! literalmente nos volamos! Tengo que comerme el manillar para que no me saque volando así que los que pesamos poco, mientras que la mayoría corona el Malagón acortamos por el sendero, más corto pero bastante más complicado y empinado y al resguardo de manera que cogemos a la cabeza para pillar la pista que nos lleva a Abantos.
Menos mal que este tramo lo hacemos más o menos al resguardo porque en el pico el aire es inclemente y ni fotos podemos hacer. Como anécdota contar que dejamos las bicis tumbadas en una losa de granito y el aire arrastraba las más expuestas!!!

Rápidamente tiramos hacia refugio Naranjera que estará más protegido.
Hay un pinchazo y mientras reparan entablo conversación con unos andarines a ver si surgen nuevos senderos pero sin gran resultado.
Reagrupamos en el refugio y visita obligada al mirador del valle de los caidos ya que la vista es muy chula.



Hace ya tiempo que tengo clavada la espinita de un paso que hay que nunca hacía y hoy lo veo sencillo así que me tiro, lo paso y hacemos una tanda de fotos los que se atreven con él. Será el comienzo de un día freekiller porque me siento desatado ;)
MN tiene problemas con la bici nueva pero como buen endurero reintenta y supera sin problemas.



Tras las fotos toca la bajada de naranjera, ensalada de ñascos con trazada poco clara aunque los regueros de agua esta vez ayudan más que perjudicar. La cabeza intenta perderse en un desvío pero reconduzco a tiempo al personal. Resultado, bajada trepidante en la que sin quererlo un saltito de un escalón pequeño resulta ser un cortado de medio metro que aterrizo sin problemas... si lo llego a ver detenidamente no me tiro fijo! Lo que hace la adrenalina en vena!





A Pedro se le ha salido la rueda trasera o algo así y toca esperarle un buen rato pero viene sin mayores consecuencias y llegamos a la pista de los campamentos.
Aquí hay una pequeña variación que nos llevará a la trialera del primer embalse sin hacer la pista pestosa. Cambiamos esta por senderos y veredas poco transitadas y algún cruce de río con poco caudal.



Pedro no se encuentra fino y nos queda lo peor ya que hemos hecho las bajadas más fáciles y aún falta bastante desnivel así que se vuelve por la carretera al Malagón mientras que el resto proseguimos hasta la trialera, donde nos lanzamos poseídos por el frenesí disfrutando de los peraltes de la bajada. Veo un desvío a la izquierda... me tiro... surcazo hiperpendiente!! frenazo... seguimos??... ya que estamos aquí...
Pues dicho y hecho, los 4 primeros nos metemos la variante "extrem" y acabamos chillando de pura adrenalina contenida puesto que el surco está lleno de ñascos y es un poco de cerrar los ojos.

Ya más tranquilitos vamos todos juntos bordeando el embalse y afrontamos la penúltima subida del día, el arrastradero de pinos. Despacito y buena letra y ale para arriba.
Al llegar a la pista JC y yo investigamos una trialerilla de subida más chunga que la pista pero también más bonita que prosigue todo el rato al otro lado de la tapia y que promete ser muy divertida para una futura bajada.





Coronamos y tras reagrupar toca la trialera del embalse de Tobar. Ensalada de ñascos como melones colocados de cualquier manera nada sencilla pero o están mejor colocadas o hemos mejorado desde la última vez porque se me hace más sencilla y la paso sin mayor complicación.

Sin dar demasiada opción al personal hacemos una variante para subir al Malagón y tiramos por la parte izquierda por sendero en vez de la derecha por pista. Es más duro y en peor estado pero contrariamente se me hace más corto y ligero aunque la cola de pelotón creo que no piensa lo mismo...



Ya estamos en el Malagón de nuevo y tenemos toda la subida realizada, todo lo que queda es bajar... y bien que queda ya que son muuuchos km ;)
Protecciones y achiperres variados y nos lanzamos por los Vascos, impresionante vereda con algún tramo técnico pero muy disfrutona y que además en Otoño se pone perfecta con las zonas rojas de Castaños. Ya se presagiaba en la naranjera pero se hace realidad en los vascos, vamos desatados y hacemos la bajada completa sin parar absolutamente nada a todo lo que da la bici. Resultado... bajada trepidante y espectacular donde más de un killer tiene que parar para recuperar brazos y piernas ;)

Reagrupamos en la carretera y toca proseguir por el Larios, más larga aún que los vascos pero más complicada técnicamente, sobre todo si se va rápido. Vamos totalmente fuera de control así que cualquier piedra es una excusa para saltar y terminamos también sin paradas repostando agua en el restaurante la Horizontal con una dosis elevadísima de Adrenalina.

Pequeño llaneo que pica para abajo por la senda en que termina con un sendero corto pero divertido en la carretera que va a Avila. 200m de carretera hasta el cruce, también de bajada y tras subir 20m llegamos al que debiera ser nuestro último sendero por la silla.
Si el otro día la silla estaba espectacular hoy está aún mejor, los colores son menos intensos pero hay más cantidad de hojas y las bajadas se hacen "intuitivas". La senda es divertidísima y a la velocidad que la hacemos más así que acabamos supercontentos.



Mientras que reagrupamos y aprovechando el buen estado de ánimo prosigo con una variante trampa que no tenía muchas esperanzas de hacer pero ojos que no ven... (la meta estaba a 200m para abajo...) así que nos metemos un pequeño pero intenso bucle que implica una trabajosa pero preciosa subida por lo mejor del Castañar de la Silla para finalizar con una bajada aún mejor que la anterior que a todos deja buen sabor de boca y mejor impresión en la retina.





Ahora si, hemos llegado a los coches y con bucles y demás hemos hecho 40km y 1500m de desnivel ñasqueros y divertidos como pocos. Los pequeños añadidos al recorrido creo que le han dado el punto a la ruta para configurarse como una buena mejora del ya clásico recorrido.

Había previsión de ser muchos pero al final fuimos 12+1 y sobre todo en la bajada el nivel fue bastante compacto con esperas mínimas lo que propició una ruta muy disfrutona que lógicamente acabamos con una buena opcional en el romantic, aunque los pedorros de la entrada al valle de los caídos se empeñaran en enturbiar desviándonos hasta Villalba para ir a Guadarrama grrrr.