Iogrea

Aprovechando que en Madrid es fiesta salimos antes hacia Ainsa para la magna kdd bicicletil que allí se llevará a cabo y paramos en el Congosto de Ólvena para realizar la via ferrata del Santo Cristo.
Nos juntamos Ricardo, Luis, Silvia y yo.

La ferrata es sencilla y tan solo tiene un paso realmente expuesto pero tiene unas preciosas vistas del congosto y un canal muy bonito por el que se asciende un buen rato.

Comienza en el km 16.5 de la carretera de Barbastro a Benabarre. Dejaremos el coche en un ensanchamiento de la carretera que hay tras pasar 2 tuneles seguidos y comienza un senderito que en 300m nos deja en un precioso puente:



Cruzamos el puente y a la derecha sale el Gr por el que se vuelve y a la izquierda comienza a subir zeteando para a 50m aparecer la sirga de seguridad.
Nos ponemos arneses, cascos y vagas y ale!
La senda asciende sin prisa pero sin pausa por una canal de piedra donde realmente no es necesaria la sirga pero permite seguridad a los que se inician.





El canal se acaba y comienza un tramo de pequeños sube y baja con pequeños pasos de piedra y unas vistas completas del congosto:





Ya estamos casi arriba y vamos por un tramo totalmente por la cuerda, lo que propicia fotos chulas y curiosas:







Un par de pasos de piedra nos acercan a la meta:






El paso más complicado es justo antes del final de la ferrata pero las grapas son firmes y la distancia adecuada.







Y llegamos a la ermita de Olvena, donde tras contemplar la vista sólo queda bajar.



El gr viene señalizado en una casa al salir del pueblo pero la vegetación lo ha tapado y ha habido un pequeño derrumbe que nos hacen dudar y pillamos otra senda que tras un rato de andar descubrimos que vamos equivocados.
Desde el final de la senda vemos el gr y el paso "oculto" de los primeros metros pero se nos hace tarde y hay que estar en Ainsa a tiempo para la nocturna en bici así que aprovechando que santiago nos llama diciendo que está en Barbastro nos recoge en Olvena y enfilamos todos juntos hacia la kdd. Pero eso... es otra historia.