Iogrea

25-10-2016
Oxford

Tras descansar del paseo de ayer nos levantamos y bajamos a desayunar. Es el típico desayuno inglés y además tienes cereales, tostadas y cosas así. Después del abundante desayuno del hotel del día anterior no es lo mismo... pero digno y suficiente para comenzar el día con la tripa llena.

Ha salido otro bonito y soleado día. Realmente todo lo que queríamos ver nos dió tiempo ayer así que hoy lo dedicamos a vagabundear por la ciudad y ver otros college que nos llaman la atención.
Recorremos un buen tramo de Park Road hasta llegar al campus universitario y nos cruzamos a Woodstock road para pasar por el pub donde se reunía Tolkien con sus alumnos, el Eagle.


Descendemos de nuevo a la zona central y entramos al Covered Market. Es curioso la cantidad de puestecillos de comida rápida y tiendecillas que hay dentro pero no terminan de atraernos para comer ya que son más bien de hacerlo ràpido y sin sentarse.
Volvemos a High street y en un callejón estrecho encontramos un pub con buena pinta y solitario donde nos ponemos las botas con un fish and chip y una hamburgesa.


Con la tripa llena se piensa mejor y recorremos completa High Street hasta llegar a un college que me había llamado la atención, el Magdalen.
Está justo al final de la calle y es barato entrar comparado con el Christ.


Mucho menos visitado, recorremos sus pasillos solitarios disfrutando de sus inmensos jardines.


Contrastan los tramos de Césped supercuidados que hay a un lado del canal con la vegetación del otro lado.



El otoño hace que luzcan en todo su esplendor los árboles y la luz de la tarde arranca tonos muy sugerentes.


La iglesia y el claustro son preciosos y como estamos solos aprovechamos para hacernos unas fotitos.





Parece que se cubre y pinta chispear. Nos estamos acostumbrando al horario inglés y ayer nos quedamos con las ganas de meternos en una tetería así que recorremos High Street indecisos y terminamos en una pidiéndonos una enorme magdalena de frambuesa...
Nos tentaba el menú completo pero sale carillo y no teníamos tanta hambre a media tarde ya que se compone de varios sandwiches, pasteles, pastas y té. Demasiado para merendar.

Completamos la visita por Oxford recorriendo el Támesis hasta el club de remo del Queen´s College y es que estar en Oxford y no detenerte un poco a ver a la gente remando le quita un poco de la gracia jeje.




Personalmente me ha gustado algo más Cambridge ya que es un entorno algo más romántico pero Oxford tiene un encanto diferente. Más dinámico y con más detalles que te ayudan a explicar muchas escenas de películas, libros...
Nos llama la atención como hay muchas tiendas de ropa con las equipaciones de los diferentes College al igual que pasa en Harry Potter con las diferentes casas.
En España las universidades no tienen tan a gala el vestuario y es raro ver a alguien con toga o equipación mientras que aquí todos van por la calle cada uno de su College y vestidos con toga al salir de clase.
Como las aulas están entre las casas da una sensación diferente al ver tanto estudiante entrando y saliendo de preciosas y elaboradas fachadas con patios muy verdes y cuidados.


Este viaje ha sido todo un acierto pero va tocando a su fin. Seguramente mucha gente estaría más días en Oxford pero nosotros hemos quedado satisfechos y como mañana el vuelo sale tarde aprovecharemos para visitar algo de camino. De momento nos queda cenar pero estamos cansados de estar todo el día andando y a Silvia no le apetece cenar así que pillamos una ensalada y unos sandwiches en el supermercado y nos los comemos en el Hostel acompañados de un rico chocolatito caliente cortesía de la casa ;)